1. La izquierda española debería recordar que Rusia no es comunista, y Putin menos, y que la OTAN actual no se parece nada a la de los años 80. Hay que apostar por un Ejército europeo. Los intereses de la UE no son los EEUU. Se ha visto claro en Afganistán.
2. Hay un tic natural de la izquierda al PSOE: percibir próximo el espacio de la antigua URSS, pasaba también con Milosevic. En los 80 y 90 era por simpatía ideológica en unos casos o de rechazo al EEUU de la guerra de Vietnam en otros. Hoy conviene actualizar el sistema operativo
3. España no tiene por qué hacer exhibiciones militares porque Ucrania no es miembro de la OTAN y no estamos obligados a su defensa. Lo inteligente es apostar en los foros internacionales por una solución pacífica.
4. Putin exige que Ucrania no sea miembro de la OTAN. Rusia tiene miedo a las invasiones desde el oeste. Napoleón y Hitler son dos memorias vivas. Una de las soluciones sería su finlandización: un país independiente sin pertenecer a un bloque militar
5. En las guerras no hay buenos y malos, hay víctimas y verdugos. En este caso complejo —fue frontera de tres imperios— hay dos potencias jugando al ajedrez sobre las vidas de cientos de miles de personas. Ojalá que hayamos aprendido algo de los Balcanes.
6. Tendría pocas dudas si tuviera que elegir entre un régimen autoritario y corrupto como el ruso, o el bielorruso, y los valores de la UE. En democracia es legítimo que cualquier partido o persona se oponga a la guerra o a cualquier demostración de fuerza
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